El escritor portugués Rui Lage descubre en esta novela, traducida al español por Juan Ramón Santos y editada por La Umbría y la Solana, a un nuevo y fascinante Fernando Pessoa, entre lo poético y lo rocambolesco, el desasosiego cósmico y el encantamiento telúrico, la conmoción de lo visible y la búsqueda de lo invisible.